El seminario se propone abordar, desde una perspectiva multidisciplinaria afín a los estudios culturales, la compleja relación entre el diseño, como práctica significante con ciertas especificidades e incumbencias, y el contexto mayor de la comunicación contemporánea. Esta relación, que es en verdad constitutiva del campo del diseño, queda a menudo opacada por una focalización excesiva -tanto académica como profesional-, en los aspectos técnico/formales de esa práctica, en su papel resolutivo, en términos comunicacionales, de las exigencias de la lógica empresarial, corporativa y de mercado, lo cual suele redundar en un empobrecimiento cualitativo de la reflexión teórica y crítica en dicho campo.
Sin negar la importancia de los procesos derivados de la globalización, que afectan centralmente el «orden del diseño» -la hiperconcentración de capitales, su «desterritorialización», los flujos y tendencias internacionales, la competitividad y el eficientismo como reglas supremas-, hay todavía otro universo concernido por tales procesos, que a menudo queda fuera de discusión: el de los sujetos involucrados, sus relaciones, la trama cultural que subtiende, con las características particulares de cada contexto, toda intervención significante.
Es este universo el que queremos integrar al análisis, planteando así una articulación comprensiva entre los diferentes aspectos que confluyen a una hipotética delimitación del campo. Porque, más allá de responder a necesidades concretas de mercado, la pregnancia del diseño en las sociedades contemporáneas, su rol configurativo en cuanto a identidades e imaginarios sociales, su compromiso respecto de políticas -a nivel local, estatal, regional, internacional- merecen una reflexión más profunda y minuciosa, en una cultura de época marcada por las tecnologías de lo visual, es decir, por el triunfo irrestricto de la imagen diseñada.
Y esta reflexión -que es la que proponemos- no abordará sólo las «reglas del arte» en cuanto a capacidad de respuesta y eficiencia formal, sino que apuntará fundamentalmente a la cuestión de los valores: qué significa hoy, en nuestro peculiar momento histórico, asumir un lugar (público) de enunciación, proponer (diseñar) imágenes identificatorias (marcas, sujetos, políticas, campañas, modos de ser y hacer), qué relación establece el diseño con las problemáticas candentes de la época (la diferencia identitaria, las ciudadanías plurales, el multiculturalismo, la creciente desigualdad, los nuevos derechos cívicos, la relación cambiante entre lo «universal» y lo particular…). Dicho de otro modo: de qué manera, contradictoria, tensional y hasta corrosiva, pueden ponerse en sintonía «diseño», «comunicación» y «crítica cultural».
Al postular esta dimensión crítica no estamos proponiendo un «retorno» a esa vertiente fundacional del diseño que lo ligaba, quizá desmedidamente, a la utopía de un mundo mejor. Se tratará más bien de articular viejas y nuevas tradiciones para mirar, desde el presente, su potencialidad constructiva, y también deconstructiva, en un mundo multifacético en constante transformación.
– Dotar a los estudiantes de instrumentos teórico/analíticos para la consideración del campo del diseño y de su propia práctica profesional, en el horizonte más amplio de la comunicación y la cultura en un mundo globalizado.
– Estimular la reflexión crítica y el debate en cuanto a la relación entre práctica significante y contexto sociopolítico y cultural, remitiendo en particular al caso argentino y sus transformaciones recientes a nivel del estado y de la empresa.
– Diseño, comunicación y significación: distinciones teóricas. El diseño en la trama semiótica de la cultura. Géneros discursivos, intertextualidad e interdiscursividad. Las nuevas formas de la comunicación contemporánea en el marco de la globalización.
– Comunicación y pragmática. El hacer del diseño y la performatividad de los enunciados visuales: hacer ver/ hacer creer/ hacer ser. El rol de la imagen en la producción de esquemas valorativos: imaginarios, culturas de época, culturas visuales y economías de la representación.
– Diseño, redes mediáticas y configuración de identidades. La industria del estilo: tendencias estéticas y políticas de identificación. Entre la «comunicación universal» y los mundos locales.
– Diseño y política: lógicas de la diferencia, nuevas ciudadanías, multiculturalismo. Nuevos espacios públicos y privados. Privatización y privación: el caso argentino y las consecuencias de la globalización.
– Diseño y experiencia urbana: huellas, itinerarios, lugares de memoria, apropiaciones del espacio público. Diseño y antidiseño. La potencialidad crítica del diseño en la sociedad contemporánea.